El negocio que las personas de más de 2 metros te están ocultando

Me ha llegado esta información.

Una familia que conozco, hicieron amistad con una familia de torres de baloncesto. Hombre, mujer e hijos. De los que ves y piensas …

«Estos deben ser jugadores de baloncesto».

Lógicamente lo piensas, porque si lo dijeras parecerías imbécil. La imbecilidad mejor de puertas adentro.

¿Hecho?

Ok.

Esta gente que se dedica al deporte profesional, normalmente tienen pocos años de vida laboral útil a explotar. Útil pa forrarse.

Aunque igual no es una expresión correcta, me refiero a que lo que ganen en su época moza es algo que hay que invertirlo porque a partir de los cuarenta la incertidumbre puede rodear tu vida. Como la de todos, vamos.

Otros como Luis Conde, jugador del Unicaja de Málaga, decidieron colgar las botas y hacerse médico. Médico de casi 2 metros.

Vuelvo a la historia.

Esta familia, los padres, empezaron a compran propiedades. Y no eran españoles especuladores. Creo que norteamericanos, pero me falla la memoria. Da igual.

Compraban viviendas y luego las alquilaban. Menudo chorrada, ¿no?

¡Qué va! Lo diferencial era a quien se las alquilaban.

Lo hacían a jugadores jóvenes que llegaban a los equipos de las ciudades en la que ellos habían jugado.

Los guiris alquila pisos …

Conocían la ciudad.

Conocían la gente del mundillo.

Conocían la realidad de los jugadores nuevos y jóvenes que salían de su cascarón.

Como padres adoptivos.

Y esa es una grandísima diferenciación. Además de poseer un activo más tarde vendible.

¿A quién llaman cuando hay jóvenes nuevos en la ciudad?

A los Cazafantasmas no.

A los guiris especuladores si.

Es una forma de especializarse.

Hay otras muy interesantes. Pero eso ya …

PD: Hoy es día de leer libros. Aprovecha.